03 Oct Vian Dajil, una diputada iraquí contra el ISIS

(El Mundo, 3 de octubre de 2016) Han transcurrido dos años de lucha y Vian Dajil sigue proyectando la misma imagen de fortaleza que impresionó al mundo. En el verano de 2014, cuando las huestes del autodenominado Estado Islámico irrumpieron en el norte de Irak, esta diputada del Parlamento del país agitó las conciencias. Su figura delgada y doliente puso rostro a la tragedia que se cernía sobre su pueblo, los yazidíes, seguidores de una fe vinculada al zoroastrismo a los que los yihadistas consideran adoradores del diablo. Aquel agosto, desde el hemiciclo en Bagdad, hilvanó un alegato que recorrió el planeta. De pie, entre sollozos de impotencia, musitó: «Señor presidente del Parlamento, nos están masacrando bajo el lema ‘No hay más Dios que Alá’. Hasta ahora 500 hombres yazidíes han sido asesinados. Nuestras mujeres están siendo secuestradas y vendidas como esclavas en un mercado. Hay una campaña de genocidio contra los yazidíes. Mi pueblo está siendo masacrado como lo fueron los iraquíes. Una religión entera está siendo exterminada. Hablo en nombre de la humanidad. ¡Sálvennos!». Su desgarradora súplica quedó inconclusa, sepultada por el dolor. «No sé lo que me sucedió. Me fallaron las piernas, perdí el equilibrio y me desplomé», recuerda Dajil de aquel mensaje de socorro que dejó a medias. La diputada, doctora en Biología de 45 años, recibe a Yo Dona en las lujosas estancias de la residencia que comparte con su familia en Erbil, la próspera capital de la región autónoma del Kurdistán iraquí.

 

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