Departamento de educación de Reino Unido. Agosto 2017. ENG.

Dos apartados son de especial utilidad en este documento: por una parte, las diferentes definiciones del término “radicalización” que se recogen en el mismo. Por otra, la descripción de los obstáculos que se encuentran los trabajadores sociales cuando intentan contar con la colaboración de las familias en la prevención de la radicalización violenta.

El informe comienza explicando la dificultad de encontrar soluciones a una problemática cuya definición está en continua mutación y genera un continuo debate entre expertos.

El apartado dedicado a las familias y a la necesidad de contar con este núcleo para prevenir la radicalización violenta es necesario para comprender la dificultad a la que los trabajadores sociales se enfrentan. El documento cuenta con la participación directa de estos, que declaran encontrar a menudo casos de jóvenes “robotizados” por sus propias familias para disimular su radicalización y no despertar así sospechas en su entorno (colegio, instituto…)

Se aborda como posible barrera a esta colaboración la desconfianza que los programas lanzados por el gobierno despierta en ciertas familias. “Los profesionales son vistos por las familias como una marca tóxica que ataca a los musulmanes en particular. Los profesionales de protección de la infancia están preocupados de que las familias que se muestran hoy escépticas del papel que desempeñan en la prevención empiecen a verles como un brazo de la policía, algo que dañaría las relaciones y la confianza necesaria, que en muchos casos se ha logrado a través del compromiso a largo plazo”.

Commission nationale consultative des droits de l’homme. Mayo 2017. FR.

Tomando como referencia la experiencia del “centro de des-radicalización” (Centre de réinsertion et de citoyenneté), que cerró sus puertas en Francia en febrero de 2017, este comunicado subraya las recomendaciones en materia de prevención como conclusiones a tener en cuenta.

1) Alerta sobre la asociación directa entre radicalización ideológica y radicalización violenta a la hora de tomar las medidas necesarias en uno u otro caso.

2) Define como “estigmatizador” y “contraproducente” los dispositivos puestos en marcha para definir el grado de radicalización. Defiende que el baremo de análisis de la peligrosidad de un individuo es impreciso.

3) Lamenta el peligro que supone que los trabajadores sociales sean vistos por las personas radicalizadas como “informantes”, lo cual aleja al sujeto de un grado de confianza para con estos agentes que es, en realidad, necesario para comprender el fenómeno de cerca y adaptar la respuesta. Aboga por la independencia de los trabajadores sociales en este ámbito.

4) Afirma que reemplazar la ideología radical por una forma de pensar que sustituya a esta primera no será el camino al abandono de la violencia como forma de vida en sociedad. Denuncia la falta de una dimensión pedagógica.

5) Apela a los servicios de protección de la infancia en lo relativo a la radicalización de menores e invita a alejar los casos de estos individuos de los servicios policiales.

6) Alerta sobre la asociación directa entre radicalización ideológica y radicalización violenta a la hora de tomar las medidas necesarias en uno u otro caso.

7) Define como “estigmatizador” y “contraproducente” los dispositivos puestos en marcha para definir el grado de radicalización. Defiende que el baremo de análisis de la peligrosidad de un individuo es impreciso.

8) Lamenta el peligro que supone que los trabajadores sociales sean vistos por las personas radicalizadas como “informantes”, lo cual aleja al sujeto de un grado de confianza para con estos agentes que es, en realidad, necesario para comprender el fenómeno de cerca y adaptar la respuesta. Aboga por la independencia de los trabajadores sociales en este ámbito.

9) Afirma que reemplazar la ideología radical por una forma de pensar que sustituya a esta primera no será el camino al abandono de la violencia como forma de vida en sociedad. Denuncia la falta de una dimensión pedagógica.

10)Apela a los servicios de protección de la infancia en lo relativo a la radicalización de menores e invita a alejar los casos de estos individuos de los servicios policiales.

CEP London. Mayo 2018. ENG.

De este informe, elaborado en mayo de 2018, cabe destacar el análisis de los errores en materia de prevención online y la evaluación de sus consecuencias. Ejemplifica el modo en que los algoritmos de Facebook han contribuido a la expansión de la ideología violenta del autodenominado Estado Islámico, facilitando su presencia digital.

El algoritmo de Facebook ha contribuido a esta expansión sugiriendo grupos, nuevas amistades y eventos a simpatizantes del Daesh, sirviendo así de principal tela de araña o ‘network’ de la radicalización en redes sociales. Para alertar sobre el riesgo de radicalización y expansión de esta ideología a través de internet, cita numerosos estudios realizados por instituciones europeas, como el publicado por Guy Van Vlierden, Jon Lewis y Don Rassler (Beyond the Califate : Belgium / Combating Terrorism Centre, February 2018). Este último subraya que el 91% de las detenciones relacionadas con el terrorismo yihadista tenían un vínculo con el eje central de la organización instalado en Iraq o en Siria.

European foundation for democracy & Counter Extremism Project. Mayo 2016. ENG.

Identificación de los casos más paradigmáticos a los que se enfrentan miembros del sistema educativo europeo cuando hacen frente a la eventual radicalización de sus alumnos. Aborda el término “identidad” y aporta herramientas para actuar de forma inclusiva y pedagógica.

Este estudio dedica un espacio a las teorías conspiratorias, la antesala del pensamiento sectario, binario y carente de las zonas grises en las que se instala la posibilidad de diálogo, entendimiento y tolerancia.

The International centre for the study of radicalisation and extremism (ICSR) London. 2017. ENG.

Basándose en las experiencias de contranarrativa llevadas a cabo en Alemania, Francia y Reino Unido, (detalladas en este informe) el ICSR concluye recomendaciones para mejorar la forma de llegar al público deseado y desmontar así la propaganda extremista. Uno de los errores más comunes experimentados en Europa en la elaboración de la contrapropaganda es el relativo al enfoque del mensaje; a menudo, estas campañas se han limitado a desmontar las afirmaciones realizadas en los vídeos de propaganda. Este informe aconseja favorecer los mensajes simples, trabajar la creatividad y explotar la fuerza viral que proporciona la era digital.

El documento es de gran utilidad, ya que establece una comparativa europea de las medidas llevadas a cabo en materia de contranarrativa, analizando las principales campañas (gubernamentales y no gubernamentales) puestas en marcha en los tres países europeos más castigados por el fenómeno de los foreign fighters. Describe el tono y la finalidad de los principales programas experimentados. Cabe destacar Stop Djihadisme o Seriously en Francia, Beltower o Ufuq.de en Alemania, Moonshot CVE o Let’s Talk About It en Reino Unido).

OSCE. Septiembre 2017

Este informe ofrece los matices necesarios a términos a menudo utilizados en la búsqueda de programas de desradicalización (extremismo, lucha contra el extremismo violento, radicalización…) antes de detallar un plan de 22 estudios de casos de buenas prácticas puestas en marcha en el mundo en las siguientes áreas:

Prisión -Policial -Jóvenes -Educación -Religión -Internet -Mujeres -Refugiados -Intervenciones -Retornados

Los casos analizados y tomados como ejemplos inspiradores en la lucha contra el extremismo violento son:

1) Action Plan against radicalisation and Violent Extremism, Norway

2) National Strategy on Countering Violent Extremism, Albania

3) Preventing Radicalisation in Italian Prisons

4) Rehabilitation of Extremist Prisoners, Kazakhstan

5) Counter Violent Extremism Tailored Community Policing, Los Angeles Police Department

6) Simulation Exercises, Royal Canadian Mounted Police

7) Fryshuset/EXIT, Suecia (Proyectos sociales-Juventud)

8) Active Change Foundation, United Kingdom

9) The Royal Atheneum, Belgium

10) Cultural and Spiritual Heritage of the Region (CSHR), Croacia

11) Fol Tash, Pristina (Medio de comunicación online)

12) Countering Extremist Narratives, Uzbekistan

13) Rewind, Spain

14) Seriously, France

15) Nahla, Bosnia and Herzegovina (promoción de un espacio seguro para la

participación activa de mujeres musulmanas en la sociedad)

16) Mothers’ Schools, Tajikistan

17)Advice Centre Radicalisation, Federal Agency for Migration and Refugees,

Germany

18) Support for Child Refugees, Turkish National Police 19) The Safe House Approach, The Netherlands

20) Municipal Safety Council, Novi Pazar, Serbia

Entre las conclusiones, cabe destacar la alerta sobre la figura del retornado y la necesidad de que los gobiernos estudien caso por caso los regresos de estos individuos a suelo europeo.

Ayuntamiento de Málaga. ESP.

Este informe constituye una valiosa fuente de información sobre el modo en que los diferentes locales deberían implicarse en la lucha contra los discursos violentos apostando por la inclusión y el mantenimiento del tejido social.

Cabe destacar la descripción de las líneas estratégicas y sus respectivos indicadores de evaluación adaptados en función de cada uno de los contextos. (Ej: prevención, promoción y apoyo a jóvenes y menores vulnerables, integración social de la población joven inmigrante)

Una aproximación a la contranarrativa yihadista. Universidad de Granada. Mayo 2016.

Se definen en un primer momento los principales marcos de acción de la narrativa yihadista, para establecer después una pirámide de interlocutores del contradiscurso y una sugerencia de mensaje a transmitir a cada uno de estos sectores de la sociedad. Estos sectores (Neutral-Simpatizante-Justificador-Comprometido) recibirán distintas contranarrativas, puesto que el grado de implicación ideológica varía entre el primero y el último. El informe divide la contranarrativa para estos cuatro niveles en tres subniveles: desprestigiar el discurso violento (para la mayoría de la población); la deslegitimación (el grado de implicación del interlocutor es mayor); la desradicalización.

Los marcos de acción de la narrativa yihadista o “agravios tóxicos” usados por esta ideología se distribuyen en:

• Marcos de acción colectivos religiosos.
• Marcos de acción colectivos políticos-ideoló
• Marcos de acción colectivos morales.

IEEE. Octubre 2017. ESP.

Aunque se trate de un documento de opinión, el texto desprende valiosas ideas sobre procesos de radicalización en el entorno penitenciario.

El segundo apartado del documento sirve de columna vertebral que recopila las medidas en medio carcelario tomadas hasta la fecha en Europa, nombrando, entre otros, la guía elaborada en 2016 por el Consejo de Europa y que expone interesantes recomendaciones sobre el tratamiento de estos presos para evitar un grado mayor de radicalización.

Acto seguido, se exponen datos sobre el incremento de la radicalización en prisión facilitados por gobiernos como el francés o el danés, explicando los distintos programas que se han puesto en marcha como respuesta a estos procesos de radicalización, vistos por el personal penitenciario desde el temor al efecto contagio a delincuentes comunes.

CIDOB. Febrero 2018. ESP.

Este análisis de los atentados que golpearon Barcelona en agosto de 2017 dedica un apartado a la prevención del extremismo violento. Lo firma Fatima Lanhait y a lo largo del mismo identifica los principales mecanismos de la radicalización, así como los factores que llevan a un ciudadano europeo a tomar las armas en defensa de una ideología sectaria. Por último, describe las metas de los programas CEV y PEV (para Combatir o Prevenir el Extremismo violento, respectivamente)

“Las estrategias que se han seguido son un re ejo de los con- textos y condiciones de cada lugar, y se han adaptado con el n de atenuar el riesgo de extremismo violento y reforzar la resiliencia frente al mismo. Ofrecen oportunidades de colaboración y aprendizaje intersecto- rial y multidisciplinario entre partes interesadas y organizaciones, tanto na- cionales como internacionales, para combatir el extremismo violento”, cita la autora, que recomienda una mayor implicación de las administraciones locales a la hora de establecer una conexión entre la sociedad civil y el sector público. La finalidad de esta propuesta no es otra que la de implicar a los diferentes actores de la sociedad en un problema común. Dicho de otro modo, el texto propone luchar contra la radicalización violenta desde la participación comunitaria, una iniciativa que necesita la puesta en marcha de redes de conexión entre sectores.

European Policy Centre. Marzo 2017. BEL.

Cabe destacar de este informe su alusión al marco de evaluación de vulnerabilidad (Vulnerability Assessment Framework) desarrollado en 2012 por el gobierno británico, y cuya utilidad se basa en establecer una serie de factores que pueden llevar a una persona a correr mayor riesgo que otras a comprometerse con un grupo extremo o una ideología violenta.

El texto vincula el riesgo con el contexto que viven los estudiantes en educación superior, no para establecer una relación directa entre ‘radicalización’ y ‘universidad’, sino para alertar sobre el peligro en que se hallan estos jóvenes ante este fenómeno. (Periodo vital de transición que puede favorecer a la participación en una causa). Para justificar esta correlación, el informe cita algunos de los casos de universitarios británicos que terminaron uniéndose a la causa islamista durante su periodo como estudiantes universitarios. “33 individuos condenados por cometer un delito de terrorismo islamista entre 1998 y 2015 (12,3% del total) estaban matriculados como estudiantes en el momento de su arresto”, cita el informe.

Estos datos son esenciales para comprender la relevancia de los programas de prevención en contexto universitario, un riesgo a menudo pasado por alto al asociar la figura del reclutado con un bajo nivel educacional. El texto afirma que en Reino Unido grupos islamistas han sabido explotar espacios universitarios para la difusión de un mensaje de odio.

Radicalization Awareness Network (RAN). Julio 2017. BEL.

Detallado informe sobre el modo de actuación que los gobiernos europeos deben aplicar ante el fenómeno de los retornados. El documento facilita durante el punto número 5 las recomendaciones sobre los métodos de intervención de seguridad, aborda la rehabilitación del individuo sin olvidar las dificultades a las que los diferentes países tendrán que enfrentarse durante los próximos años.

Resultan de gran utilidad para la reflexión de diferentes programas de rehabilitación los gráficos aportados al comienzo del informe sobre las diversas motivaciones que han podido llevar al retornado a regresar a su país de origen tras formarse militarmente y asumir la causa islamista como propia. Estudiar caso por caso las intenciones del retornado será esencial para evolucionar hacia políticas de reinserción que no supongan el menor peligro posible para la sociedad civil.

El punto número 7 se centra en las consideraciones a tener en cuenta a la hora de adoptar políticas de reinserción del menor retornado. (Intervención jurídica y protección de la infancia, evaluación de los riesgos y las necesidades del menor, asistencia familiar, el papel de las instituciones educativas…)

El apartado 7.4.7 aborda un factor esencial en la prevención contra la radicalización violenta: la lucha contra la ideología extremista en el menor que regresa de una zona de conflicto.

DiverCity. Mayo 2017. BEL.

Este documento realiza una exhaustiva radiografía de Verviers, uno de los puntos más tocados por la radicalización violenta en suelo belga.

Analiza los centros de culto, centros culturales, deportivos, lugares de reunión, mezquitas, detallando las actividades que se llevan a cabo en cada uno de estos contextos para tratar de comprender los espacios explotados por predicadores radicales, pero también para esclarecer el estigma de esta ciudad.

Para ejemplificar esto último, resulta especialmente interesante el punto 5 del informe, relativo a las entrevistas llevadas a cabo con habitantes de Verviers. Estos intercambios, plasmados y parafraseados en este documento, son relevantes para alertar del riesgo de la transmisión de un imaginario “radical” asociado a la totalidad de una ciudad. Si bien es cierto que algunas de las impresiones abordan la presión social, la percepción de la radicalización en algunos de sus barrios o el miedo de sus ciudadanos, otras respuestas optan por lamentar el estigma.

La columna vertebral de este informe es de gran utilidad porque estudia el fenómeno desde el interior. La elaboración de informes de este tipo en las ciudades más castigadas por la radicalización violenta sería esencial para aportar datos sobre el impacto en la vida cotidiana y encontrar así soluciones adaptadas para su prevención.

European Institute of Peace (EIP) Junio 2017. BEL.

Necesario mapa social elaborado en Molenbeek (Bruselas), que examina tanto el contexto sociocultural, haciendo una radiografía demográfica sin olvidar los distintos rangos educacionales y de género que conforman los diferentes grupos de esta comuna belga, especialmente castigada por la radicalización violenta, y tan sobrerrepresentada en el fenómeno de los foreign fighters.

El texto se enriquece con la voz de sus habitantes, los datos recogidos hasta agosto de 2016 y la intervención de expertos.

Flemish Peace Institute. Bélgica. Septiembre 2017. BEL.

En primer lugar, se abordan términos como el abandono de la violencia y la desradicalización, diferenciando tanto las herramientas como los procesos necesarios en ambas realidades.

Este informe enumera cuatro factores presentes en el proceso de radicalización, de gran utilidad para idear medidas que se adelanten a las necesidades de los jóvenes europeos cuyos perfiles se han sentido atraídos por la propaganda yihadista. Estos factores son:

1) Búsqueda de una identidad

2) Búsqueda de un significado

3) Sed de justicia

4) Búsqueda de aventura/sensaciones

Se analiza el impacto de la contra-narrativa aconsejando que esta se estructure a través de un análisis sociodemográfico del público al que va dirigido, adaptando el mensaje en función de la edad, la ciudad, el rango social…

En este mismo apartado, se alerta sobre la generalización de la audiencia definida como “de riesgo”, a la que ciertos programas de sensibilización van dirigidos. El informe cita el ejemplo de las campañas dirigidas a las comunidades musulmanas, advirtiendo que a menudo esta clasificación es, per se, contraproducente, en tanto en cuanto una comunidad en su conjunto es alienada y señalada como sospechosa.

Se aborda el poder que el discurso de una víctima de terrorismo puede tener en la creación de una contra-narrativa. La unión de ex adeptos a una ideología y víctimas de esa (u otras) violencias sectarias es positiva para presentar un discurso de prevención contra la radicalización violenta. El informe cita el ejemplo de dos actores en la lucha contra la radicalización: Patrick Magee (exmiembro de IRA) y Jo Berry, cuyo padre fue asesinado por el primero en 1984. En el año 2009, recuerda el texto, ambos fundaron el organismo ‘Building bridges for peace’ con la finalidad de impulsar un diálogo roto entre diferentes campos de una misma sociedad.

Egmont Institute. Febrero 2018. BEL.

Recopilación de las medidas tomadas en Bélgica, Alemania y Países Bajos a la hora de abordar el regreso de combatientes europeos. Desde su vuelta de zona de combate hasta la respuesta judicial aportada por cada uno de estos tres países.

Los apartados más útiles del informe son sin duda los relativos a la respuesta penitenciaria. Esta comparativa permite retomar el debate sobre el tipo de régimen penitenciario que más conviene a los individuos radicalizados (aislamiento, separación de presos comunes, régimen ordinario de detención…) En el caso de Bélgica, se ha optado por la detención ordinaria, que se complementa con una serie de medidas suplementarias que giran en torno a reforzar las limitaciones de las actividades del individuo, reducir sus visitas y sus comunicaciones. El documento alerta de los riesgos de estas medidas en el abandono de la violencia por parte del detenido y, a largo plazo, su la posterior reinserción en la sociedad.

CAT CENTRE. Enero 2017. FR.

Este análisis permite tener en cuenta los principales factores de riesgo en suelo europeo tomando como referencia los datos recogidos durante el año 2017 en los países de la Unión Europea.

Se trata de información muy variada y de gran utilidad, relativa al tipo de explosivos utilizados, los perfiles de los individuos implicados en los actos terroristas o en los intentos de ataques fallidos, así como el número de proyectos abortados en suelo europeo.

Politiques publiques de prévention de la radicalisation. Institut d’aménagement et d’urbanisme. (IAU) Septiembre 2017. FR.

El objetivo primero de este informe es definir con exactitud lo que se entiende actualmente por “extremismo violento”, con la finalidad de aplicar las soluciones de forma más concreta.

El informe presenta un apartado de gran relevancia para el estudio de las políticas de prevención puestas en marcha en territorio europeo. Concretamente, el punto 2 del documento está dedicado íntegramente a tres modelos de prevención de la radicalización violenta:

1) El modelo alemán. (Desde el sistema de centro de llamadas HATIF en 2010 hasta su cierre y la puesta en marcha del primer programa de desradicalización del país en el seno de la sociedad civil, llamado HAYAT)

También se aborda la creación del Violence Prevention Network, centrado en la lucha contra la radicalización en prisión.

2) El modelo danés. Cabe destacar el trabajo interministerial llevado a cabo desde 2009 bajo el paraguas de PET (Politiets Efterretningstjeneste) con la implicación de diferentes actores de la sociedad civil.

El documento presenta un gráfico que corresponde al sistema piramidal respetado por el gobierno danés para decidir las misiones de cada actor civil y también a qué esfera de la sociedad corresponde hacerse cargo de los individuos en función de su grado de radicalización.

El informe lamenta que este esquema piramidal esté, en la gran mayoría de los casos, centrado en individuos que ya han regresado de un teatro de operaciones siro- iraquíes, infravalorando el peligro de aquellos que no se han desplazado físicamente a los rangos del Estado Islámico pero sí simpatizan con su ideología violenta.

3) El modelo inglés.

La antesala de los actuales programas de prevención fue el creado tras los atentados del 11 de septiembre. Recibió el nombre de Contest, y ha ido mutando con el contexto hasta la legislación antiterrorista adoptada en febrero de 2015: Counter terrorism and Security Act.

El informe subraya dos particularidades inglesa: por una parte, la ausencia de un número de teléfono al que acudir en caso de presenciar signos de radicalización violenta, que en su lugar cuenta con servicios sociales locales. La segunda particularidad reside en la colaboración directa de las comunidades musulmanas en el programa PREVENT. Hasta 2011, recuerda el informe, los grupos salafistas eran considerados interlocutores del gobierno británico.

INHESJ (Institut National des Hautes études de la sécurité et de la justice) Abril 2017. FR.

Destaca de este informe los perfiles de terroristas yihadistas presentados como una fuente más de análisis a tener en cuenta. A través de las entrevistas realizadas a adeptos a esta ideología, el texto pretende transmitir la definición que cada uno de estos actores tiene de términos tan relevantes para el mantenimiento del tejido social como:

-Islam

-Ciencia

-Dios

-Salafismo

-El compromiso político -Terrorismo y yihad -Francia

-Democracia

-Las discriminaciones

-El choque moral

-La comunidad magnificada -Geopolítica

-El enemigo

-Al Qaeda y Daesh

-El complot

-La sexualidad

-El lacismo y el securalismo -El arte, la literatura y el cine

Los yihadistas entrevistados aportan su definición e impresiones de cada uno de estos conceptos, ofreciendo una valiosa información que es sin duda de gran utilidad, pues su estudio puede contribuir a la creación de contranarrativas más eficaces, así como facilitar el análisis de la expansión de este fenómeno entre individuos jóvenes.

DIIS. Septiembre 2015. DNK

En este documento se explican los diferentes matices del sobreexplotado término “radicalización”, y a través de un apartado “Qué, Quién, Cómo” se aborda el fenómeno aportando cuatro recomendaciones para el buen uso de este concepto.

Resulta relevante porque la construcción de una contranarrativa a la altura de la amenaza reposa en el uso correcto de los conceptos que componen el fenómeno en sí. Abordar la “desradicalización” sin conocer los diferentes matices del término “radicalización” falsearía las iniciativas puestas en marcha y abriría un debate paralelo basado en la forma, y no en el fondo; he aquí la importancia de dedicar tiempo y espacio al debate sobre la terminología y su consecutiva evolución a lo largo del tiempo.

Las cuatro recomendaciones a propósito del uso de este concepto son:

-Seamos específicos cada vez que utilicemos el término ‘radicalización’. Clarificar el contexto, con una mirada a cuestiones ligadas al contexto social, a la integración y a la seguridad.

-Tengamos claro que la definición de ‘radicalización’ no está basada en la objetividad científica sino en una comprensión política, y siempre cambiante, de la realidad. Seamos honestos sobre la naturaleza política de cualquier acepción de la palabra ‘radicalización’.

-Seamos críticos con cualquier uso del concepto que, bajo el paraguas de la prevención de la violencia, intente marginalizar a personas con un punto de vista diferente.

Think tank VERS LE HAUT. Enero 2018. FR.

Este think tank dedicado a los jóvenes elaboró en enero de 2018 una guía para comprender los factores que favorecen el adoctrinamiento en edad adolescente y post- adolescente. Aporta recomendaciones a nivel educativo para reducir las posibilidades de la interiorización de un discurso violento.

Propone en uno de sus apartados tratar sin tabúes la religión como un elemento más del debate, y abordar el “laicismo” como un concepto que permitirá a los jóvenes desarrollar su capacidad crítica y de discernimiento. En esta misma línea, apuesta por abordar la problemática de la radicalización desde las instituciones educativas (a través de la filosofía, del análisis de la actualidad, del estudio del uso de los medios e internet), con la finalidad de fortalecer el espíritu crítico de los jóvenes.

Danish Institute for International Studies. DIIS. Noviembre 2016. DNK.

El texto subraya el peligro de asociar el discurso contra-narrativo con la realidad. El argumento del informe reposa en uno de los factores conocidos como catalizadores en el proceso de radicalización: la búsqueda de aventura y de un proyecto más atractivo que el que se vive en el instante en el que este proceso se produce. Por ello, el documento recuerda que contra-argumentar la propaganda llevando al interlocutor al terreno de la “normalidad” podría generar rechazo, como también sucede, -afirma el informe- al presentar las ideas del discurso contra-narrativo como hechos irrefutables.

El joven podría interpretar esta descripción inamovible como una demostración de la manipulación por parte del poder, y se podría contribuir en reforzar la credibilidad del mensaje propagandístico que se intentaba refutar.

Cabe destacar una de las conclusiones: “El desafío no consiste en analizar la propaganda radical y aliarse con los expertos en marketing y los guionistas para diseñar contraargumentos convincentes que promuevan la normalidad de la clase media como una alternativa positiva al radicalismo. Una parte de la atracción de ese radicalismo es precisamente el hecho de que de la espalda a una normalidad que puede parecer inalcanzable y no está abierta a la diversidad política y religiosa que buscan estos jóvenes”.

DIIS. Septiembre 2015. DNK

En este documento se explican los diferentes matices del sobreexplotado término “radicalización”, y a través de un apartado “Qué, Quién, Cómo” se aborda el fenómeno aportando cuatro recomendaciones para el buen uso de este concepto.

Resulta relevante porque la construcción de una contranarrativa a la altura de la amenaza reposa en el uso correcto de los conceptos que componen el fenómeno en sí. Abordar la “desradicalización” sin conocer los diferentes matices del término “radicalización” falsearía las iniciativas puestas en marcha y abriría un debate paralelo basado en la forma, y no en el fondo; he aquí la importancia de dedicar tiempo y espacio al debate sobre la terminología y su consecutiva evolución a lo largo del tiempo.

Las cuatro recomendaciones a propósito del uso de este concepto son:

-Seamos específicos cada vez que utilicemos el término ‘radicalización’. Clarificar el contexto, con una mirada a cuestiones ligadas al contexto social, a la integración y a la seguridad.

-Tengamos claro que la definición de ‘radicalización’ no está basada en la objetividad científica sino en una comprensión política, y siempre cambiante, de la realidad. Seamos honestos sobre la naturaleza política de cualquier acepción de la palabra ‘radicalización’.

-Seamos críticos con cualquier uso del concepto que, bajo el paraguas de la prevención de la violencia, intente marginalizar a personas con un punto de vista diferente.

Finding local solutions to global challeges. DIIS. Junio 2017. DNK.

Cabe destacar de este informe su insistencia en la búsqueda de colaboradores locales para la problemática global, y las recomendaciones en materia de prevención:

– El estudio de las diferentes situaciones locales que conforman el problema global. El texto propone dejar de reflexionar en soluciones globales y pararse a analizar exhaustivamente los diferentes contextos en los que se desarrolla el problema, (social, económico, familiar, carcelario…) así como el papel exacto desempeñado por cada una de las instituciones con la que se trabaja en la lucha contra el extremismo violento.

– Prestar más atención a las dinámicas de grupo y a los contactos que son tan decisivos en la deriva violenta de una ideología. El texto hace hincapié en el peligro que supone asumir la existencia de “lobos solitarios” y alerta de la necesidad de abordar esta figura como un proceso de radicalización que también ha contado con un contexto global, una red de contactos y una influencia externa.

– Tener en cuenta que el estudio de las dinámicas utilizadas por grupos pequeños (barrios, grupos de conocidos…) en los procesos de radicalización será más efectiva a largo plazo que el hallazgo de futuros métodos de des-radicalización. (Esto es, invertir en prevención en los grupos llamados ‘de riesgo’).

– La prevención contra el extremismo violento debe ir acompañada de un proyecto ilusionante que no deje cabida en la vida de los jóvenes europeos a falsos proyectos basados en carencias motivacionales. Sin una contrapartida a nivel personal, el mensaje preventivo tan solo habrá llegado a mitad de camino.

• Puesta en marcha de un intercambio de experiencias que permita saber a ciencia cierta los métodos hasta ahora aplicados que han funcionado contra la expansión del extremismo violento en nuestro tejido social. Esto es, más indicadores de evaluación y más transparencia para la investigación en este campo.

DIIS. Febrero 2017. DNK.

Este informe se centra en el estudio de las contranarrativas y la detección de los principales errores llevados a cabo en este campo. Cabe destacar algunos de los desafíos identificados como urgentes para el hallazgo del tono necesario en los discursos preventivos.

– Asumir la contra-narrativa como un discurso de confrontación, que refuta, corrige o ridiculiza la propaganda punto por punto puede reforzar el discurso extremista, ya que genera rechazo en quienes se encuentran en pleno proceso de radicalización.

– La contra-narrativa debe ir acompañada de un plan asociado a un proyecto. El discurso como única herramienta para prevenir actos de violencia se antoja deficiente.

– Asumir que una problemática global necesita de una contra-narrativa global es un error. Dirigir un programa de prevención a un público amplio dispersa las capacidades de éxito y puede crear el efecto contrario al deseado.

– Identificar a la audiencia que puede verse atraída por las narrativas de Daesh o Al Qaeda no es suficiente para estar a la altura de una contra-narrativa. Es necesario detectar el público frágil ante un mensaje propagandístico pero la construcción de contra-discursos atractivos necesitará de un análisis exhaustivo del target (necesidades, carencias, motivaciones, contexto socioeconómico). A partir de este estudio, será necesario crear políticas locales que reparen las fragilidades en cada uno de estos campos.

Entre las recomendaciones que concluye el informe, encontramos la insistencia en las medidas de inclusión social, las políticas de integración, y la búsqueda de alternativas que resulten más atractivas que un proyecto basado en la violencia pero que han logrado llenar un hueco de carencias socioeconómicas y en ocasiones, no exentas de racismo y de desigualdad de oportunidades. Aunque conviene no generalizar, es necesario prestar atención a estos factores para elaborar una contra-narrativa capaz de ofrecer un proyecto de vida atractivo y basado en la igualdad de oportunidades.

DIIS. Noviembre 2016. DNK.

Se aborda en este texto la libertad de expresión como una de las herramientas utilizadas por quienes pretenden terminar con la democracia. Esta denuncia va a acompañada de un reto propuesto por el autor: aprovechar esta realidad para detectar el modus operandi de quienes utilizan espacios públicos y libertades propias de las democracias para romperlas desde dentro.

Este informe defiende que las libertades propias de una democracia pueden ser generadoras de debate público sobre las ideas utópicas presentadas por movimientos radicales. De este modo, se puede provocar el acercamiento al debate de figuras cercanas o simpatizantes de una visión radical de las cuestiones abordadas. Se aboga igualmente por apoyar iniciativas que generen un debate real, capaz de invitar al espacio público a las frustraciones y críticas, no para castigarlas, sino para aprender de ellas, encontrar su origen y reflexionar lo antes posible en soluciones locales que terminen con estos catalizadores del pensamiento sectario.

DIIS. Abril 2015. DNK.

Este texto relata los peligros existentes en redes sociales y aboga por una educación que apueste por la capacidad crítica como camino “largo” pero firme hacia la tolerancia y el intercambio de ideas. Las campañas de prevención no son incompatibles, pero no pueden convertirse en un parche a una problemática que reposa en diversos factores, entre los que se encuentra la falta de pensamiento crítico o la ausencia de herramientas intelectuales para discernir la propaganda y evitar los mensajes complotistas que preceden a un discurso de tinte radical.

El informe sugiere que las campañas de prevención dirigidas a jóvenes que ya se hallan inmersos en procesos de radicalización no tienen posibilidades reales de lograr el efecto deseado, en tanto en cuanto estos individuos son vulnerables y ya se encuentran en un pensamiento binario. Por lo tanto, alerta del efecto que pueden lograr que las campañas promovidas por las autoridades en estos casos: rechazo y confirmación de sus ideales radicales.

Las recomendaciones de este análisis para proteger a los jóvenes de ideologías sectarias en la red son varias:

1) Fortalecer el pensamiento crítico y el intercambio de ideas

2) Educar a los jóvenes en las habilidades digitales

3) No caer en la creación de campañas de prevención basadas únicamente en la

falsificación y el rechazo de los argumentos propagandísticos.

DIIS Septiembre 2015. DNK.

Este informe es de gran interés en la búsqueda de métodos de prevención en derivas sectarias porque aborda la radicalización desde un ángulo menos común, pero no por ello menos relevante: la politización de una violencia ya existente en el individuo. Sugiere que la mera definición de ‘radicalización’ influye en el modo en que gobiernos y organismos se enfrentan a la problemática. Por eso describe casos de terroristas que han atacado en suelo europeo y cuyo pasado criminal podría haber facilitado la banalización de la violencia como medio que justifica una finalidad que han conocido durante su trayectoria (en prisión o fuera de ella).

También adjunta datos de estos proyectos terroristas país por país, siendo Francia, Reino Unido, Alemania y España los países europeos más castigados por este fenómeno en el año 2017.

Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). Septiembre 2017

Encontrar medidas de prevención adaptadas a Europa conlleva concebir el extremismo como un problema mundial. Por esto, este informe sobre la radicalización violenta en África, especialmente vulnerable al extremismo violento, supone la mirada externa necesaria para hallar soluciones que analicen el contexto en su conjunto, y evitar caer así en la tentación de encontrar parches locales a una realidad global.

Son de especial interés los apartados Journey to Exremism in Africa: Profile Infographic, así como Implications for policy and programming, ya que presentan una radiografía del extremismo (causas, perfiles) y, posteriormente, una lista de recomendaciones para atacar la problemática desde diferentes ángulos. Entre estas sugerencias, hallamos la relativa a la búsqueda de una política de coordinación nacional, regional y global al extremismo violento. (Página 90 del informe).

Puede resultar de gran utilidad para alimentar un debate necesario a este respecto el apartado relativo a la explotación de la religión como arma de radicalización violenta. Se encuentra en el punto Religious Ideology (página 91) y ofrece cuatro sugerencias relativas al continente africano de las que Europa puede inspirarse para adaptar sus respuestas a esta problemática. Cabe destacar, entre ellas, la relativa a la amplificación las voces de los líderes religiosos que desafían las interpretaciones radicales del Islam, lo cual daría lugar a la transmisión de un mensaje de cohesión y de tolerancia religiosa.

Bundeszentrale für politische Bildung (Federal Agency of Civic Education) GER.

Este informe trata de responder a la controvertida cuestión de la contranarrativa como método de prevención de la radicalización violenta. ¿Cómo debería ser un producto mediático para que éste ejerciera un efecto real de desradicalización? ¿Es posible, a través de los medios, contribuir a controlar el extremismo, los crímenes de odio y la hostilidad propia de la juventud inmersa en un proceso de radicalización?

Citando diversos estudios de la red Soufan Group, este informe alerta sobre los límites de la contranarrativa a través de medios de redes sociales y medios de comunicación tradicionales. Expone diversas recomendaciones, entre las que se encuentra favorecer, en detrimento de la contranarrativa en medios, el personal experimentado y con la habilidad de intervenir personalmente en programas de prevención y rehabilitación.

German Institute on Radicalizacion and Deradicalization Studies. Enero 2017. GER.

Este informe está redactado con la finalidad de convertirse en un manual para los distintos actores civiles y estatales en materia de rehabilitación de individuos inmersos en procesos de radicalización violenta.

El documento cita al Rome Memorandum (2011), elaborado por UNICRI y ICCT, como único trabajo a escala internacional que establece criterios de calidad para aplicar programas de rehabilitación entre detenidos extremistas. Dicho informe enumera 25 puntos que persiguen la eficacia de un programa de desradicalización, establece los objetivos respetando los derechos humanos en el ámbito penitenciario.